domingo, 30 de agosto de 2009

Los pasos del callejón sin salida...


El suplicio de la noche y el suplicio del día el suplicio de la realidad y el suplicio del sueño despliegan ese movimiento que se ignora y al que otros pudieron, no sé cómo, llamar «vida», como una torturaque desde lejos en la oscuridad pensara un animal sin ojos con el alma dormida soñando esta pesadilla...Como una tortura estudiada para que el sufrimiento aumentara poco a poco y más allá del momento en que se hizo insoportable haciéndonos aprender por la fuerza una Ciencia del Dolor como la única sabiduría posible en la Zona Clausurada.
El suplicio de la realidad y el suplicio del sueño y mi cuerpo en el potro exhibiendo su tortura como una vanidad ? ved ahora un potro en medio del escenario vacío ? o mi yo disponiéndose a recorrer una vez más los pocos pasos que caben en el callejón sin salida al que muestro como una vanidad. Y avanzaré, avanzaré mi cuerpo sin inteligencia ni alma por la calle en donde nadie me conoce, andaré por allí contoneándome y hablando solo, sin ver que llevo una mujer sobre mi espalda con las uñas clavadas en mis hombros y mordiéndome el cuello ebria de mi sangre. Final del formulario.


...Panero.